jueves, 30 de julio de 2009

Quinto encuentro

Cada vez que me pongo a escribir el blog pienso en las imágenes que me rodean cuando vivo: fotografías calificadas de algunos momentos de mi vida y seguramente de muchos otros también que quiero guardar o eliminar que me llevan a reflexionar sobre las construcciones de la realidad a través de las imágenes, me gustaría citar el último ensayo de Susan Sontag, Ante el dolor de los demás, publicado por Alfaguara en el año 2003.
Sontag parte de un profundo sentimiento de compasión, de empatía ante el sufrimiento ajeno, de necesidad de analizar y desentrañar el significado del dolor y cómo reaccionamos ante él. Todo ello en el nuevo contexto tecnológico de los últimos tiempos donde la imagen impera en los celulares, las cámaras digitales y la televisión “in extremis” y familiariza el horror con lo cotidiano o bien construye una realidad que no existe más que en esos retazos de memoria congelada donde sea. La autora había trabajado en 1977 sobre la fotografía: “la fotografía es una manera de mirar. No es la mirada (…) La manera de mirar moderna es ver fragmentos (…) una fotografía es un fragmento: un vislumbre Acopiamos fragmentos” así elaboramos la realidad y además pretendemos que sea memorable es decir” inolvidable” por eso insistimos en sacar fotos y más fotos y guardarlas ya no en portarretratos sino en carpetas de la pc o de las notebooks, algo efímero pues cuando se inquietan las aguas de los sistemas informáticos, generalmente se pierden las fotos. Lo inolvidable se convierte en efímero pero el dolor no, a pesar de las imágenes, el dolor subsiste en el tejido social maltrecho y ultrajado y se expande como el hambre, la desolación o la soledad. Allí del otro lado de ese panorama nos resta solo la solidaridad y la memoria. En hechos, en procesos de reparación, en justicia.
Qué imágenes nos brindan todos los medios y por qué será. ¿Será que es conveniente congelar la capacidad de asombro ante: el dolor de los demás? Deseo dejarles una cita más del libro que ha movido mi inquietud en esta entrada de hoy: “insensibilidad y amnesia parecen ir juntas por la vida”.

Esta es mi voz:

La mano que se acerca,
lo acaricia,
se desliza bajo la ropa de su alma.
La mano lo sacude,
él responde
con ese cotidiano gesto distante.
Que las manos descansen
que no perturben.
Ni dar, ni recibir,
presencia y lejanía,
mejor, no vincularse.

Libros para compartir:

Ya que he hablado de las imágenes, comenzaré presentando algunas de las muchísimas muestras de excelentes libros argentinos que yo denomino “escrituras solidarias”.
Los dos libros seleccionados pertenecen a la colección que dirige un creativo autor integral Istvan Schrriter.
Los planos de mi ciudad.2003, de Alexiev Gandman de Libros –álbum del eclipse. Un texto en blanco y negro elaborado con tinta (y paciencia) china que recorre la ciudad desde distintos ángulos y por cierto con diversas miradas. Un maravilloso trabajo artístico.

Radiografía de una bruja.2008, de Beatriz Ferro, ilustrado por Elenio Pico, Libros-álbum del eclipse. Tiene una escritura concisa de una gran autora argentina que maneja el espacio narrativo con solvencia, desde las excelentes imágenes hasta la breve historia: una síntesis.


El arresto .2001 de Perla Suez editado por Norma, una novela que inicia una trilogía que nos habla del desarraigo, la inmigración y de los recuerdos. La historia de una familia inmigrante rusa que llega al país y se afinca en el campo pero no todo es sencillo ni en la arrocera ni en la ciudad convulsionada por las ideas políticas que dominaron el modernismo.
Suez se luce con una escritura bien cuidada y con una historia sólida.

Para los que buscan poesía:
Perlas de Brujas.2008 de María Rosa Mó. con las maravillosas ilustraciones de Leicia Gotlibowski., de ediciones SM. Un placer visual íntegro y una poética que indaga el universo de las brujas. Un libro original e intenso.

Libros de referencia:
Hacia una literatura sin adjetivos.2009, María Teresa Andruetto de editorial Comunicarte. Un ensayo filosófico y literario sobre el trabajo del escritor y las demandas del mercado actual. Tiene una escritura potente y atrapante. Un disfrute para el lector además de un aprendizaje.

La otra lectura. La ilustración en los libros para niños.2005 Istvan Schritter de Lugar editorial. Es un recorrido minucioso e inteligente sobre la imagen en los libros para niños: cómo trabajan los ilustradores, la lectura de las ilustraciones y la didáctica de “la otra lectura”. Hay mucho para agregar, quizás lo más importante sea la mirada desde la imagen y la comunión que se entabla con el texto escrito.

Para lectores activos:

Jugo de Mango. 1988. de Ángela Gorodischer, editado por Emecé, una novela breve que se lee "de un tirón” diría un conocido autor. Es divertida y tan placentera como el jugo de mango.

Notas:
Nueva convocatoria al premio Sigmar de literatura 2010 que cierra el 30 de octubre. Informes: premiosigmar@sigmar.com.ar

Siempre espero la “mirada de Uds.” y sus comentarios que son un motor de crecimiento personal.

miércoles, 15 de julio de 2009

Cuarto Encuentro

Adelanté la salida del blog por la cercanía del día del amigo y motivada por la recepción obtenida.
Estuve pensando en la emergencia sanitaria que atravesamos y en la mediatización diversa, confusa de mensajes que recibimos. En esa situación de estar siempre al límite de una catástrofe de la que siempre salimos, maltrechos pero salimos (debe ser cierto que Dios tiene algún mojón en Argentina…) y a propósito de mi creencia, escucho y observo el comportamiento de los medios y recuerdo a Jean Baudrillard, sociólogo y filósofo francés fallecido en el 2007 y su teoría del hiperrealismo, Cultura y Simulacro. 1993, Kairos, Barcelona, en el afirma que son los medios los que construyen el mundo en el que vivimos, que no es la realidad, sino, lo que él denominaba "la hiperrealidad":
El simulacro no es lo que oculta la verdad. Es la verdad la que oculta que no hay verdad. El simulacro es verdadero”. Sobre esta afirmación elaboró una teoría sobre el funcionamiento de los medios y de la verdad en el mundo posmoderno, plagado de virtualidad. Baudrillard ha vinculado algunos aspectos del hiperrealismo con un cuento de Borges, una obra de Macedonio Fernández y otros escritos de Octavio Paz, no por simuladores sino como ejemplos de laberintos ficcionales creíbles como los que construye la representación mediática. Pero ésta, la mediática, ha disuelto la realidad: el mapa borró al territorio. El pensaba los medios desde la filosofía. Pierre Bourdieu lo hizo desde la sociología en Sobre la televisión.
El silencio- señalaba Baudrillard- está eliminado de la televisión". Suponía, y tal vez con razón, que los medios en general "huyen del silencio". El mundo contemporáneo se caracteriza por un proceso de desmaterialización de la realidad: la mirada del hombre ya no se dirige hacia la naturaleza, sino hacia las pantallas de televisión; este tipo de comunicación se ha convertido en un fin y en un valor absoluto. El exceso de información y el bullicio dificultan la búsqueda del sentido.
Estamos a merced de lo que nos permiten saber en esa “construcción” entretejida entre la información que provee el Estado sumada a la de los medios, un interrogante para estar alertas, sobre todo porque no somos pantallas, somos personas. Creo, a pesar de las críticas que ha recibido este autor, que sus argumentos tienen hoy significado y sentido.

Esta es mi voz:

Tomé “prestada” la voz del escritor argentino Julio Cortázar, no pude hallar la fecha de escritura, ni de publicación de esta poesía, a mí me la regaló un día del amigo, Elsa Bornemann, escrita a mano sobre un papel celeste por ella:

Los amigos

En el tabaco, en el café, en el vino,
al borde de la noche se levantan
como esas voces que a lo lejos cantan
sin que se sepa qué, por el camino.

Livianamente hermanos del destino,
dióscuros, sombras pálidas, me espantan
las moscas de los hábitos, me aguantan
que siga a flote entre tanto remolino.

Los muertos hablan más pero al oído,
y los vivos son mano tibia y techo,
suma de lo ganado y lo perdido.

Así un día en la barca de la sombra,
de tanta ausencia abrigará mi pecho
esta antigua ternura que los nombra.

Libros para compartir:
He venido cargada de equipaje, rodeada de buenas palabras –diría Ana María Machado.
Para los más pequeños y por demanda de algunas lectoras que trabajan con niños en situaciones especiales:

Abeja Oveja. 2000, de Graciela Repún, editado por Sudamericana, un libro que no enseña las letras, es un excelente juego de equívocos verbales de la protagonista. Tiene mucho ritmo, humor y las ilustraciones de Luciana Fernández.
El cuento de la Ñ. 2004, de Pelayos, Sudamericana, otro juego de palabras hecho historia, pequeña, sencilla , con mucho humor.
Cumpleaños Feliz.2008 de Iris Rivera, editado por edb. Un cuento pura prosa poética, breve, disfrutable y celebratorio.

Un poco de suspenso:


La noche de meteorito.2006, de Franco Vaccarini, ediciones SM. Una novela que atrapa desde el momento en el que Valentino empieza a pensar que en su casa hay un extraterrestre. Hay tensión y suspenso hasta el final. Vaccarini es un autor que ya tiene una voz y un tono propio –diría María Teresa Andruetto.

Un secreto en la ventana .2006 de Norma Huidobro, ediciones SM. Es una novela que se deja leer con avidez, mezcla de suspenso y policial, la autora nos lleva de la mano hasta el final y sin abrir una grieta por donde hurgarlo.

Para los que buscan poesía:

Maíces de silencio .2002 de María Cristina Ramos, una excelente poeta argentina además de narradora. Editado por Ruedamares. No hay reseña, aquí vale la confianza y el conocimiento de la obra de la autora. Es bello, simplemente bello.


Para lectores activos:
Un lugar perdido.2007 de Norma Huidobro editado por Alfaguara- Clarín, voy a reproducir las palabras de Albero Manguel que están en la contratapa:”la epopeya de un heroísmo singular, íntimo, que luminosamente se convierte en universal.” Esa es la mejor síntesis.

Felicitar:
Las postulaciones de las autoras María Teresa Andruetto y Liliana Bodoc para el premio Iberoamericano de SM enviadas por ALIJA.
No espero reciprocidad en estas sugerencias de lectura, solamente deseo compartirlas y crecer con otras. De eso se trata: mantener un vínculo virtual.


sábado, 4 de julio de 2009

Tercer encuentro

No sé por qué extraño mecanismo de la memoria, esta semana y aún hoy he estado pensando en la influencia del pasado en el presente y en el presente imposible de pensar sin mañana.
En esa dualidad de pasado y presente ingresó otra; la de los perdedores y los ganadores en términos socio-culturales. Los que están adentro de un sistema por muchas y diversas razones y los que no están y lo más doloroso: los que nunca van a ingresar a ninguno. Los que forman parte de las estadísticas. ¿Qué los une en mi pensamiento recurrente? Que el pasado y el presente es el mismo para los de ayer y los de hoy o peor porque hay más perdedores hoy que ayer y no solamente porque somos más en el país sino quizás porque hemos deshecho casi todos los entramados solidarios.
Quizás ellos, me refiero a los más pobres no quedaron en el pasado, simplemente no ingresaron al presente porque no existen socialmente (existen para votar a quienes los someten, triste síntesis de un país que fue perdiendo la dignidad) y como mi blog es cultural no puedo dejar de remitirme al sociólogo francés Pierre Bourdieu y su extraordinario trabajo: La Miseria del mundo (1998) del FCE que me fue regalado en 2000 y que después de leerlo, envié a una ONG. Quiero mencionar dentro de su extensa obra editada, Contrafuegos (2003) de Anagrama, otro maravilloso testimonio de los efectos del neoliberalismo en el mundo donde el autor aborda con minuciosidad el tema de la globalización y la exclusión en todas sus variables.
Leer a Bourdieu es leer nuestra historia, si un joven quisiera asomarse a explicar la propia, bastaría con sumergirse en ese universo de palabras claves para la sociología: habitus, campo, capital cultural, etc.
Quizás las recientes elecciones, una mirada constante sobre la pobreza de los argentinos y las enfermedades erradicadas que supimos “recuperar”, el Dolor país de la fallecida Silvia Bleichmar, me llevaron a reunir en este encuentro el pasado vigente en el presente, con miras a no perder sus "privilegios" en el futuro.
Dejo una cita que expone el pensamiento de Bourdieu: “La fuerza de la ideología neoliberal estriba en que se basa en una especie de neodarwinismo social. “Son los mejores, los más brillantes”, como se dice en Harvard, lo que triunfan. (…) hay una filosofía de la competencia según la cual los más competentes son los que gobiernan y los que tienen trabajo y estudios, lo que implica que quienes no lo tienen no son competentes. (…) la ideología de la competencia es muy adecuada para justificar una posición que se parece bastante a la de los amos y los esclavos. (Contrafuegos, pág.61) sugiero leer el capítulo completo que es de una claridad y excelencia poco común.
Me pregunto cuándo podremos arribar algún día a decir Todos y no simplemente: nosotros.

Esta es mi voz:

Crónica I:

Ellas, las tres mujeres, estaban tomando un café en un domingo de invierno entretejido de amistad y soledad al mismo tiempo. La conversación transcurría sin mayor entusiasmo.
Lo vieron entrar, era pequeño, desangelado y tenía la mirada apagada. Era un chico que pedía comida, monedas, bebida, sin manos, casi sin voz.
El mozo de acercó para echarlo, rápido y eficiente. El pibe inmutable se aferró a la mesa de ellas.
-Tengo hambre -dijo mirando a una de las tres sin sonrisa ni súplica.
-¿Qué querés comer? -le preguntó la mujer
-Tengo ham…,no pudo terminar porque el mozo lo había tomado del brazo para sacarlo, pidiendo las disculpas del caso.
-Déjelo –le pidió la mujer -es mi invitado.
-No se puede quedar señora ni de invitado a la mesa -le respondió en forma tajante el mozo. Ella lo miró y se encontró con unos ojos clausurados a cualquier réplica.
-Hágale un sanguche de jamón y queso y ... ¿qué más te gustaría comer?- le preguntó al chico
-No sé qué es el jamón, doña, cualquier cosa porque tengo hambre.
-Hágale un sanguche completo -se apuró a responder
-¿Quién lo paga? -preguntó el mozo con la misma frialdad inicial.
Las tres se miraron, una tomó la cartera y la abrazó, la segunda, revolvió la taza del té vacía y la que estaba manteniendo la conversación contestó categórica: yo lo haré.
El mozo le dijo al chico que esperara afuera.
-No, él espera acá hasta que Ud. el traiga el pedido que le hice.
El mozo la miró con disgusto, las mesas linderas dejaron sus conversaciones para observar la escena. Enseguida, el hombre trajo el sanguche -¿me lo paga ahora o lo sumo a la cuenta de la mesa? -la inquirió con desagrado.
-Se lo pago después –respondió la mujer sin mirarlo mientras entregaba el paquete al chico que también sin mirarla, susurró un: gracias, doña. A irse, en la puerta, se volvió, buscó al mozo con unos enormes ojos helados y le aulló: ¡Hijo de puta!

Libros para compartir:


Sopa de estrellas. 2003 de Mercedes Pérez Sabbi con excelentes ilustraciones escenográficas de Luciana Fernández de editorial Sudamericana es el libro que elegí para leer, compartir y trabajar con los más chicos el doloroso tema de la niñez y la pobreza. Fue el primer libro que abordó el tema de los niños cartoneros sin golpes bajos. Una revelación en su momento y lo sigue siendo para mí cada vez que lo releo.
Los agujeros negros. 2008 de Yolanda Reyes de editorial Alfaguara, un cuento que tiene un componente informativo explícito entramado con el relato. Su autora es colombiana pero conocida y reconocida por su trayectoria en la formación de lectores.
El libro habla de los estragos de la guerra, la desaparición de los padres y ese agujero negro que es la búsqueda de la verdad en la propia vida fue originalmente publicado en la colección de los Derechos del Niño por Alfaguara y UNICEF en el año 2000. Me parece un ejemplo claro de un libro sin frontera etaria.
Finalmente para los lectores adultos una novela que conmueve y duele al mismo tiempo.
Elena sabe. 2007 de Claudia Piñeiro editada por Alfaguara, muestra el drama de una mujer que padece el mal de Parkinson y que espera sentada en una silla el tiempo para que una pastilla le haga efecto y pueda incorporarse y caminar. El dilema que tiene frente al supuesto suicidio de su hija en el que no cree y su necesidad de saber y vivir. La historia plantea el vínculo entre madre e hija y otros temas colaterales que se tejen alrededor de la enfermedad y la muerte.
No sé si hay temas específicos en literatura, sé que hay buenos y malos libros. Yo intento a través de mis ojos generar y compartir la curiosidad que ellos demandaron en mí.